Muy buenas, pues ahora pasaremos a una pieza que es simplemente magnífica. Mi Seat 850 Especial del año 1966.
Primero un poquito de introducción para saber de lo que estamos hablando, y despues comenzamos con los detalles del pequeño.
La historia del Seat 850 hay que abordarla junto con la de su hermano italiano, el Fiat 850, ya que el Seat 850 original era prácticamente el mismo vehículo. A comienzos de los sesenta, la empresa automovilística Fiat comenzó el diseño de un nuevo modelo de tamaño medio para cubrir el hueco existente entre el Fiat 600 y el Fiat 1100. Aunque inicialmente se quería desarrollar un modelo completamente nuevo, el limitado presupuesto disponible obligó a que, finalmente, la empresa diseñase un vehículo derivado del Fiat 600.
El Fiat 850 se lanzó al mercado en el año 1964. La primera versión en estar disponible fue el Fiat 850 Berlina, que compartía con el Fiat 600 de la mecánica. Sin embargo, el nuevo Fiat 850 aportaba un mayor refinamiento que su ilustre progenitor. El trabajo desarrollado por el entonces jefe de proyectos de FIAT, Dante Giacosa (1905-1996), resultó brillante: un frontal cuadrangular más alto, faros delanteros más grandes, un parabrisas más amplio, una línea más aerodinámica gracias al rediseño de la parte posterior. El habitáculo, aunque estructuralmente idéntico al del Fiat 600, incorporaba novedades avanzadas; por ejemplo, un radiador de calefacción independiente evitaba la entrada en el habitáculo del aire caliente y maloliente del motor. En resumen, á los ojos del público el nuevo automóvil constituía un enorme salto adelante respecto a su antecesor, el Fiat 600.
El modelo que nos ocupa es el Especial, que se diferenciaba de la versión estandar en la potecia (10 caballos superior en el especial), frenos de disco delanteros en el especial y algunas cosillas más.
En cuanto a la pieza, decir que el molde es magnífico. Las proporciones son muy acertadas, y se ha cuidado hasta el último detalle. En el frontal nos encontramos la parrilla pequeña que llevaba este modelo, los faros con el borde cromado y con los intermitentes debajo (esos sí son algo grandes). El parachoques Es muy acertado, aunque el cromado no es del todo creíble.
El color elegido para este modelo es precioso y realmente acertado, así como las llantas, que son simplemente perfectas.
Los interiores tiene un salpecadero detalledo, con los relojes sorprendentemente parecidos a su homónimo a escala 1:1.
En cuanto a la parte trasera, es sin duda lo mejor del coche. El capó del motor con la rejilla tallada le da un nivel de detalle impresionante, y tanto la matrícula, como la insignia (de 850 E) y los faros de plástico no hacen sino aumentar dicho detalle. El tubo de escape debería ser gris, en lugar de negro, como era en el modelo original.
Espero que os hagais una idea aproximada de la calidad enorme que según mi opinión tiene esta maravilla de pieza...
Ahora unas imágenes del pequeño.
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